La Comisión de Jesús a su iglesia es clara: “Id y haced discípulos de todas las naciones” (Mateo 28:19). Esta es una tarea que no debemos tomar a la ligera, ya que es nuestra responsabilidad como seguidores de Cristo llevar el mensaje del evangelio a todas las personas y hacer discípulos en todos los lugares del mundo.
Implantar iglesias es una parte fundamental de esta misión. Cuando hablamos de implantar iglesias, nos referimos a establecer comunidades de creyentes en lugares donde no hay presencia cristiana o donde la iglesia es escasa. Esto implica llevar el mensaje de salvación a aquellos que aún no lo han escuchado y formar una comunidad de creyentes que puedan adorar a Dios y crecer juntos en la fe.
La implantación de iglesias es esencial porque nos permite alcanzar a personas que de otra manera no tendrían acceso al evangelio. En muchos lugares del mundo, hay comunidades enteras que nunca han tenido la oportunidad de escuchar acerca de Jesús y su amor por ellos. Al establecer iglesias en estas áreas, estamos llevando esperanza y salvación a aquellos que más lo necesitan.
Además, la implantación de iglesias nos permite hacer discípulos de manera efectiva. El hacer discípulos implica no solo llevar a las personas a aceptar a Jesús como su Salvador, sino también enseñarles a vivir de acuerdo con sus enseñanzas y capacitarlos para que a su vez hagan discípulos. Esto implica un proceso de enseñanza y acompañamiento constante, donde los nuevos creyentes pueden crecer en su fe y convertirse en líderes que impacten a otros con el mensaje de Jesús.
Es importante destacar que la implantación de iglesias no solo se limita a áreas remotas o países no alcanzados. Incluso en lugares donde hay una presencia cristiana establecida, existe la necesidad de seguir implantando iglesias para llegar a aquellos que aún no conocen a Cristo. Cada persona tiene el derecho de escuchar el evangelio y tener la oportunidad de responder a él.
Como iglesia, debemos ser apasionados por cumplir la Comisión de Jesús. Esto implica estar dispuestos a salir de nuestra comodidad y confort para llevar el mensaje del evangelio a todos los rincones del mundo. No importa cuán pequeños o grandes sean nuestros recursos, todos podemos hacer algo para contribuir a esta gran tarea. Ya sea a través de la oración, el apoyo financiero o el servicio directo, cada uno de nosotros puede desempeñar un papel importante en la implantación de iglesias y la formación de discípulos en todo el mundo.
En resumen, la implantación de iglesias y la formación de discípulos son elementos fundamentales de la Comisión de Jesús a su iglesia. Debemos ser apasionados por llevar el mensaje del evangelio a todos los lugares del mundo y estar dispuestos a hacer nuestra parte para cumplir esta gran tarea. Que podamos ser fieles a nuestro llamado y trabajar juntos para alcanzar a aquellos que aún no conocen a Cristo.